Después de varios años de encienrro, la royina viuda Ista comienza una peregrinación enbusca de sí misma.
Bujold deja las aventuras de Miles Vorkosigan para adentrarse en la fantasía.
Aunque en esta novela la acción se sitúa en un mundo diferente, tienen en común una ambientación casi medieval en que las mujeres no tienen un papel igualitario en la sociedad, la importancia de la política y la profundidad de los personajes protagonistas.

Esta novela, aunque es una historia independiente, recoge personajes de una novela anterior (que fue dividida en dos por La factoría, aunque acaban de reunirla en el único tomo original), siendo protagonizada por la royina viuda Ista.

Como dato curioso, comentar que al dar la vuelta al mapa que aparece al comienzo del primer tomo se puede ver que la autora se ha inspirado en el de España, así como para los nombres de los personajes y los títulos nobiliarios (roya, royina, marzo, marcesa etc…)

Al comienzo de la historia la protagonista es una mujer que ha llegado a los cuarenta, con un pasado tormentoso a sus espaldas (fue tomada por loca y estuvo presa varios años), y necesita libertad.
Ista reflexiona sobre la posibilidad de salir al mundo y vivir, muy consciente, como ella misma piensa, de que las aventuras están tradicionalmente reservadas a muchachos jóvenes, pobres y huérfanos. Con cierto humor considera que ella es huérfana (acaba de perder a su madre) y se pregunta si eso será suficiente.

Al poco, inspirada por un grupo que va de peregrinación, decide imitarlos y lanzarse a la aventura.
Para ello se hace acompañar de un dedicado (sacerdote al servicio de uno de los cinco dioses), una guardia cuyos principales miembros son los hermanos Foix y Ferda, levemente competidores por la atención de la correo (algo inusual en ese mundo y época) Liss reconvertida en dama de Ista.

La historia concede especial importancia a los cinco dioses: la madre, el padre, la hija, el hijo y el bastardo, que es al que más se nombra en la historia, incluyendo la leyenda acerca de sus orígenes que cuenta su dedicado.

En torno a este dios, a los demonios que habitan en el interior de algunas personas y al destino de Ista se desarrolla la segunda parte de la novela, tras vivir un par de situaciones de peligro en el viaje que separa a los protagonistas.

Desde que Ista llega al castillo de Arhys de Lutez (bastardo de un hombre cuya vida y muerte pesan en el pasado de Ista) y descubre la existencia de su medio hermano Illvan, asociando todo a los sueños que ha tenido, el relato se centra en ello, consumiendo excesivas páginas para lo que cuenta, tantas que hace pensar un misterio mayor del que luego se revela.

Como puntos a su favor destacar la utilización de una protagonista atípica (mucho mejor que la de “Restos de población” de Elizabeth Moon, comentada en esta misma categoría), la compleja relación entre los dioses, demonios y magia o la profundidad con que trata a unos personajes que evolucionan a lo largo de la novela.

Como menos positivo, que se hace demasiado larga para lo poco que sucede en realidad y un final quizá excesivamente sencillo.

“Paladín de almas” ganó los premios Hugo y Locus de 2004.