El poeta inglés del siglo xvII Andrew Marvell escribió: «La tum-ba es un lugar agradable y tranquilo pero nadie, creo, lo adop-ta». En esta imaginativa novela, dos de los personajes tratan de desafiar la verdad de la afirmación de Marvell. Peter Beagle, escritor nacido en Nueva York, sólo tenía veintiún años cuando publicó este relato irónicamente divertido (y a veces poético) acerca de lo sobrenatural. Comienza en el cementerio de Rochester, en Nueva York, donde un ex propietario de una farmacia llamado señor Jonathan Rebeck ha establecido su hogar. Retirado del mundo y sintiendo mayor afinidad con los muertos que con los vivos, ahora duerme en un pequeño mausoleo. Nunca abandona el cementerio, donde disfruta de la compañía de los espíritus locales y un inverosímil cuervo que habla (el pájaro mantiene al señor Rebeck provisto de bocados alimenticios) . Entre aquellos a quienes ofrece su amistad se cuenta el desdichado fantasma de Michael, un hombre de treinta y cuatro años que ha sido asesinado por su mujer. Vemos a Michael volviendo a la conciencia en su funeral; más tarde escapa del ataúd pero descubre que es incapaz de abandonar el cementerio.
Le llevó un rato comprender que había dejado la tumba, y cuando lo hizo, eso no parecía muy importante. «He salido –se dijo a sí mismo– y puedo hablar nuevamente y moverme por aquí, pero no estoy mejor de lo que estaba.» Vivo, podía al menos mantener la pretensión de tener algún lugar adonde ir, pero ahora sólo podía sentarse junto al camino durante los millones de años siguientes, si lo deseaba…
Aún no había lápida, sino sólo un marcador metálico pequeño. Decía: «Michael Morgan, 7 de marzo de 1924–10 de junio de 1958», y esta concisión lo complacía. … Mi cuerpo está allí, pensaba. Todas mis comidas de pollo, mis rascados de cabeza, y estornudos, y fornicaciones y baños calientes, y los bronceados al sol, y la cerveza y las afeitadas, todo enterrado y olvidado. Todas las pequeñas mezquindades borradas.
Michael juega al ajedrez y discute los problemas del mundo con el señor Rebeck, pero, como es sólo un fantasma, no tiene apetitos y no puede dormir. Con el tiempo se les une otro fantasma, una mujer atractiva y soltera llamada Laura, que se mueve como «una pluma de diente de león en un día de pequeños vientos, tocando apenas el suelo». Los dos fantasmas se enamoran uno de otro, pero, ¡ay!, no pueden tocarse: «Había un punto en el espacio en el que sus manos, tenues como un suspiro, se encontraban y parecían unirse y a través de las cuales brillaba el sol y caía una hoja». Pero el sensual señor Rebeck también encuentra una compañía femenina entre los vivos. Gertrude Klapper, una bella viuda de edad mediana traba conocimiento con el viejo recluso cuando visita la tumba de su marido. Rebeck empieza a tomarle simpatía, pues ella es una expansiva dama judía de buen corazón (es el personaje mejor elaborado de la novela) y muy necesitada de compañía. Gradualmente, ella lo hace salir, y Rebeck, conmovido por la situación de los desdichados Michael y Laura, decide abandonar su agradable e íntimo lugar y habitar entre los vivos. Esta fanta-sía ligera de Peter S. Beagle (nacido en 1939) es muy hablada, sentimental y a menudo lírica. Tiene también gran encanto y es una obra notable para un autor que apenas acababa de salir de su adolescencia en la época de su composición.
FICHA DEL LIBRO
ENLACE AL LIBRO: CONVERTIR ESTE LIBRO «
TÍTULO=»Un lugar agradable y tranquilo (PETER S. BEAGLE)»
ENLACE DE DESCARGA: ENLACE DE DESCARGA (En el banner vertical)
REFERENCIA Y AUTOR: «Un lugar agradable y tranquilo (PETER S. BEAGLE)»
FORMATOS DISPONIBLES: EPUB,FB2,MOBI