[Werner, or The Inheritance]. Drama en cinco actos, en verso, de George Gordon Byron, conocido por lord Byron (1788-1824), publicado en 1823. Procede del «Cuento del alemán» [«The German’s tale»], en los Cuentos de Canterbury, de las hermanas Sophia y Harriet Lee.
El hijo del conde Siegendorf, que, desterrado por sus fechorías, ha adoptado el falso nombre de Werner (en la obra fuente: Kruitzner), se encuentra por fortuita coincidencia en una misma casa con su enemigo, el conde Strahlenheim, e impulsado por irresistible impulso, le roba. Su hijo Ulric (en la fuente llamado Konrad) más resuelto, mata a Strahlenheim para ocultar la vergüenza de su padre, pero, sin que éste lo sepa, culpa como autor del delito a un húngaro llamado Gabor. Pasa algún tiempo, Werner es ahora conde Siegendorf y se le presenta Gabor, que acusa a Ulric del delito. Ulric intenta matar a Gabor, pero se lo impide Siegendorf, que no quiere mancharse las manos de sangre, y muere abatido por su propia infamia y por el delito de su hijo.
Byron halló en el personaje de Kruitzner aquel complejo de orden y debilidad nerviosa, de rudeza y sentimentalismo, de ilustración y espíritu feudal, que ofrecía afinidades con su tipo de héroe, y perfeccionó a Kruitzner en su Werner, «envuelto en las espiras de sus propias pasiones como en vivas serpientes», roído toda su vida por el remordimiento de una falta cometida. Le proporciona un motivo amoroso el afecto de Ida, hija de Strahlenheim, por Ulric. El final del drama hace pensar en el de La abuela (v.) de Grillparzer (1817): «Abre ahora tu fosa, oh abuelo mío… la estirpe de los Siegendorf se ha extinguido».
M. Praz