[Une visite de noces]. Comedia en un acto de Alexandre Dumas, hijo (1824-1895), representada en París en 1871. La señora Lidia de Morancé, viuda desde hace poco, recibe en su casa a una joven pareja de recién casados, Gastón y Fernanda de Cygneroi, de regreso de un largo viaje de bodas y ya padres de un niño. Gastón fue por algún tiempo amante de Lidia, a la que abandonó para casarse, precisamente cuando ella estaba a punto de quedar libre y habría podido legitimar sus relaciones.
Lidia sufre por ello todavía, y mira sorprendida a la mujer que ha sido elegida en su lugar, tan incolora, tan diferente de ella. Pero Lebonnard, un buen amigo de Lidia, imagina una pequeña comedia que tiene por objeto descubrirle a ella y descubrir al público el pobre mecanismo de los instintos y de los impulsos que conducen al hombre al adulterio o al matrimonio. En el transcurso de nueve rápidas y hábiles escenas, el autor muestra a Gastón completamente dedicado a su mujer y a su hijo, deplorando el adulterio, haciendo un despiadado análisis de su falsedad y de su inconveniencia; luego a Gastón celoso, curioso, ardiente, dispuesto a reanudar sus relaciones con Lidia, cuando ciertas revelaciones imaginarias de Lebonnard le hacen entrever en la mujer abandonada una profundidad de corrupción y una capacidad de libertinaje nunca sospechadas; por fin cede a la desilusión y vuelve con su mujer, cuando descubre el juego y no halla en Lidia más que una mujer fiel y enamorada.
La tesis postulada por el autor con su ardiente e impetuosa lógica es la decidida condena del adulterio, destinado fatalmente a resolverse en el odio o en el desprecio recíproco de los culpables. Lo breve de la comedia hace más elocuente el proceso, pero también hace un poco artificiosa la acción; sin embargo, ésta se salva por un soplo de realismo que empapa el diálogo y lleva la inquietante amargura de sus observaciones sobre las relaciones entre los sexos hasta un poco más allá de lo que la tesis reclama.
E. C. Valla