[Psiche]. Es la penúltima colección de poesía de Giovanni Prati (1814-1884), publicada en 1876. Son 568 sonetos escritos en gran parte entre 1868 y 1874. Psique, que sigue a Armando, representa en la historia de la poesía de Prati el abandono de las grandes ambiciones románticas y el repliegue hacia un realismo cotidiano y minucioso, al igual que ocurrió en la poesía francesa con Coppée y Prudhomme; no faltan, en Psique, reflejos de las Épreuves, Estancias y poemas (v.) y Soledades (v.).
Es un mundo pequeño y familiar, cuya aceptación, aunque brote del propósito de hacer un uso más prudente de las fuerzas de su musa, no es menos sentida como una renunciación; el cansancio de la vejez y la desilusión roen las sensaciones y destiñen los objetos, mientras de vez en cuando el antiguo demonio lírico atormenta al poeta: «y nosotros combatiremos esta villana/prosa, suciedad de polvo y betún». Entre tanto, el poeta va observando con tristeza los síntomas de su decaimiento: el sombrero le induce a notar que sus cabellos son grises; la bufanda le recuerda a los críticos malignos a cuya cara de buena gana la tiraría; los enseres de su habitación le recuerdan el cuartucho de sus primeras batallas; y de todo esto exprime el amargo zumo de la desilusión.
De ésta brota una especie de rencoroso y áspero alejamiento de los hombres, que se aplaca tan sólo en la visión de la libre y variada naturaleza a la que él tiende; estado de ánimo que alcanza su más pura expresión lírica en el soneto: «Bajo una encina tenderme, ni triste ni contento/de mi destino y no contar los instantes,/y oler los perfumes del enebro/y mirar las rosadas nubes errantes», sin pedir a la «joven velada Isis» los secretos de sus divinos encantos, y renunciando a conocer el secreto del universo: «nada yo supe del misterio :/nada. Y en el sueño nada más me queda/que el perfume de los enebros y un cielo de rosa». Sin embargo, precisamente a Isis pedirá el secreto, y ella descubrirá su rostro divino: y será, en Isis (v.), la conquista de la más serena sabiduría en el consuelo de la poesía. El rasgo más notable de Psique es su cuidadosa elaboración formal: la fase, por decirlo así, parnasiana de la poesía de Prati.
D. Mattalía
Hay, efectivamente, algo nuevo y atractivo en esta última producción de Prati, precisamente debido al melancólico replegamiento del anciano y célebre artista sobre sí mismo, a su abandono del arte de grandes ambiciones. (B. Croce)