Continuación del Amadís de Gaula (v.), hecha por el adaptador español de la famosa novela, García Rodríguez de Montalvo (siglos XV-XVI). Esta breve novela caballeresca, publicada en 1510, insiste en el tema añadido por Montalvo al IV libro del Amadís, narrando las empresas y proezas de Esplandián, hijo de Amadís (v.) y de Oriana (v.), desde el momento que Urganda la desconocida le arma caballero, hasta sus bodas con su amada Leonorina. La novela es muy inferior al modelo, del cual repite con monotonía frases y temas: aventuras, combates, encantos y todo el acompañamiento fantástico del Amadís.
Con todo, en algunos episodios sobresale una cierta originalidad de invención. Es famoso el juicio que emitió Cervantes en el escrutinio de la biblioteca de Don-. Quijote: señalando un volumen, el Barbero declara: «Es Las sergas de Esplandián, hijo legítimo de Amadís de Gaula»; y el Cura sentencia: «Pues en verdad que no le ha de valer al hijo la bondad del padre. Tomad, señora ama; abrid esa ventana y echadle al corral, y dé principio al montón de la hoguera que se ha de hacer».
A. R. Ferrarin