Novela publicada en los Estados Unidos en 1927 y en Francia en 1932. En el prefacio de la edición francesa, el ensayista americano H. L. Mencken declara que a su juicio Elmer Gantry es la mejor obra de Lewis, y añade: «La recomiendo a los franceses quizá como el mejor cuadro de la vida americana que jamás haya sido proyectado sobre el papel; un cuadro espantoso, pero verdadero».
Ciertamente si las obras de Lewis encierran numerosas sátiras contra la vida americana, Elmer Gantry es, con mucho, la más severa y profunda. Lewis traza en esta obra el retrato de un auténtico charlatán que llega a ser obispo de la Iglesia Metodista. Al principio Elmer Gantry es estudiante —un estudiante deportista, bebedor, libertino y por completo indiferente a la religión. Tras una hazaña más grave que las otras se deja «convertir» por el reverendo Roberts y se transforma en pastor bautista.
Después de una unión con la hija de un diácono, debe abandonar la Iglesia Bautista. Se hace entonces viajante y en sus correrías encuentra a Sharon Falconer, mujer atractiva que propaga la religión evangelista. Elmer es primero su asistente y luego su amante. La pierde en un accidente y se lanza a la charlatanería médico religiosa sin éxito. Entra entonces en la Iglesia Metodista y, a despecho de ciertos escándalos, sofocados a pesar de las acusaciones de sus enemigos, triunfa, se casa, tiene éxito en su vida material: es la victoria de la hipocresía. Se ha dicho que Elmer Gantry es una mezcla de Gil Blas y de Tartufo.