Julien Sorel, un joven de orígenes humildes aparentemente tímido pero ambicioso, es tomado por monsieur de Renal, alcalde de Varriéres, pequeña ciudad del Franco Condado, como preceptor de sus hijos. Muy pronto simpatiza con Mme. de Renal, convirtiéndose en su amante e iniciándose en la vida mundana de provincias.
Preocupada por las voces que corren, Mme. de Renal aleja de sí a Julien, que entra en el seminario de Besanfon. Aquí se gana las simpatías del superior, quien lo envía como secretario del marqués de la Mole a París. Estimado por su protector, Julien suscita el interés lleno de admiración de Mathilde, la hija del marqués, que se enamora de él. Mathilde queda encinta y, resultando ahora ineludible el matrimonio, el marqués procura un título nobiliario a Julien. Pero Mme. de Renal, empujada por su confesor denuncia el arribismo carente de escrúpulos de Julien.
Éste, viendo arruinado su ascenso social, se dirige a Verriéres y, durante la misa, hiere de un disparo a su ex amante. Arrestado, es condenado a muerte. En sus últimos días, Julien medita sobre sus experiencias y se da cuenta de que su verdadera personalidad se había expresado en el amor desinteresado hacia Mme. de Renal: el amor hacia Mathilde y su desenfrenada ambición no tenían en cambio ninguna importancia. Mme. de Renal lo conforta con sus visitas y, tres días después de la ejecución de Julien, muere abrazada a sus hijos.