[Whims and Oddities]. Colección de poesías, en los más diferentes metros y sobre los más variados temas, del inglés Thomas Hood (1799-1845), publicadas en dos series que aparecieron, respectivamente, en 1826 y 1827. Algunas de ellas son — como ya las contenidas en su obra anterior Odas y discursos a los grandes (v.)— esencialmente satíricas y humorísticas, como «Una receta para la civilización» [«A Recipe for Civilization»], en la que se sostiene que lo que distingue a los hombres de los brutos es el arte de guisar; «El maestro irlandés» [«The Irish Schoolmaster»], descripción de la vida, de las tareas y del método didáctico de un torpe maestro; o aún «Una historia de hadas» [«A Fairy Tale»], en la que un mercader ambulante se cree embrujado, porque su casa móvil se la lleva un asno al cual se le enredó en ella su cola; o «El buque del demonio» [«The Demon-Ship»], eficaz narración de cómo un náufrago estaba aterrorizado por el color oscuro de los extraños tripulantes que se encontraban en el buque que le había salvado, y que al fin se dio cuenta de que no se trataba de demonios, como él se había creído, sino sencillamente de carboneros.
Pero en otras su humorismo llega a ser tétrico, y su ironía, concretándose en visiones fantásticas, adquiere un vigor dramático; en el «último hombre» [«The last man»] un verdugo, encontrándose al amanecer del año 2000, solo en el mundo con un mendigo, le mata por quedar el único e indiscutido dueño de todo, y luego se da cuenta, desesperado, que ya no podrá escapar nunca a su soledad, pues no queda nadie ni para ahorcarle a él; en el «Sueño de Bianca» [«Bianca’s Dream»], la linda veneciana Bianca, después de haber rechazado durante largo tiempo el amor de Giulio que suspira por ella, sueña una noche que se ha vuelto vieja y fea y al día siguiente se apresura asustada a ceder a las insistencias de su enamorado; la «Leyenda de Navarra» [«A legend of Navarre»] cuenta que un barón, al que se le creía muerto, fue encerrado en un armario para que no molestara en las fiestas en honor de la llegada del rey, y que despertó de repente cuando un individuo, que en la oscuridad le había creído un jamón, le clavó una navaja en un muslo. Finalmente encontramos una vena más delicada en ciertas breves composiciones como «Amor» [«Love»], en que se define el amor como «un comediante que representa muchos papeles en el raro carnaval de la vida»; como «Un ramito invernal» [«A Winter Nosegay»], invectiva contra las flores del invierno «frígidas y rígidas», «emblema y despechada moral de la humanidad»; o como «La flecha del Parto» [«A Parthian Glance»], patética evocación de pequeñas penas infantiles y de los primeros dolores de la adolescencia. El tono de la selección es fundamentalmente humorístico; pero ya se percibe en los momentos mejores la profunda simpatía humana que inspirará más tarde a Hood la Canción de la camisa (v.).
A. P. Marchesini