Gustavo

Personaje de la novela El Cartujo (v.), de József Eötvös (1813-1871). Joven conde francés que apenas ha tenido verdadera infancia, Gustavo vive encerrado en su propio yo, del cual no sabe salir. Esta íntima insatisfacción suya busca re­medio en el amor, pero una vez más su anhelo resulta fallido.

En su vida entran en realidad dos mujeres: la aristocrática Julia, que pertenece a su misma casta, y Betty, humilde modista. Cuando Julia huye con un amante, Gustavo se consuela sedu­ciendo a la modista. Pero Betty, que le amaba sinceramente, desaparece desespe­rada y Gustavo reconoce entonces toda la profundidad de su pecado y del verdadero amor. Persuadido de la inutilidad de la vida, se retira entonces a un monasterio de cartujos, la «Gran Cartuja», en busca de paz y de reposo. Vuelve a salir por última vez al mundo para buscar a Betty mori­bunda y recoger de ella el perdón, y luego, viene el olvido de todo.

Idealista, irreduc­tible, alma frágil, sensible y refinada, Gus­tavo pertenece a la familia de Werther (v.) y a la de todos los desesperados héroes ro­mánticos de Chateaubriand, de Constant y de Lamartine, enfermos de egocentrismo y de exasperada sensibilidad. Pero a dife­rencia de Werther o de Adolfo (v.), Gus­tavo intenta superar el estéril plano de su egoísmo en nombre de un amor univer­sal y de una solidaridad humana. Se ha dicho que El Cartujo es el intento de «pro­yectar al exterior la materia enferma, o sea el dolor universal» y matar a fuerza de dialéctica la sensibilidad egoísta que sofoca a la idea humanitaria de que tan necesitado está el mundo.

G. Hankiss