[De anima]. Breve tratado acerca de la naturaleza del alma, escrito por Flavio Magno Aurelio Casiodoro (480-575?), el ilustre colaborador de Teodorico, por invitación de algunos amigos suyos, como complemento de sus Varias (v.). En 12 capítulos, el autor da primero una definición del alma, la cual, creada por Dios, es racional e inmortal, no tiene figura, esto es, no ocupa espacio, y encierra en sí las virtudes. Desde la cabeza, su residencia, el alma ejercita su poder sobre todo el cuerpo, que es como su templo. El alma es libre de volverse hacia el bien o hacia el mal, es inmortal y en el más allá es premiada o castigada según sus méritos en la vida terrena. Tras un breve resumen de su tema, Casiodoro cierra la obra con una exhortación a sus amigos a consagrarse a Dios, seguida de una larga oración. No nueva por su contenido, sino derivada de los Escritos Sagrados y las obras de San Agustín y de Claudiano Mamerto, también esta obra revela en Casiodoro virtudes de divulgador más que de pensador original. En su conjunto, la obra resulta clara y agradable, aunque superficial. Muy conocido en la Edad Media, este tratado ha ejercido en los escritores posteriores un notable influjo.
E. Pasini