[Conlationes]. Obra de moral ascética en 24 libros de Juan Casiano (hacia 360-hacia 435) fundador del famoso monasterio de S. Víctor de Marsella. Esta obra, como otra del mismo autor (v. Instituciones monásticas), estaba dedicada a la exposición del monaquismo egipcio, y escrita también por iniciativa del obispo Castor. Continuando la tradición clásica del diálogo, que en la literatura cristiana tendrá un éxito singular, Casiano finge referir una serie de conversaciones que había tenido con anacoretas egipcios. Las conversaciones se desenvuelven, naturalmente, en torno a la moral monástica, a las virtudes que se han de conseguir y a los vicios que es preciso extirpar.
Pero el diálogo es puramente formal; la verdad es que se trata de disertaciones desarrolladas por los maestros del monaquismo egipcio, o más bien puestas por Casiano en boca de ellos, aunque sea preciso admitir que la base de aquéllas son las enseñanzas y noticias recibidas por el autor. A esta obra debe Casiano el que haya de ser considerado como el padre del semipelagianismo. En efecto, en la «conlatio» XIII sostiene que Dios concede al hombre su ayuda, en vista de la buena voluntad y de la fe que en el hombre descubre. El éxito de esta obra, compuesta poco después del año 420, fue mayor que el de la primera. El de Casiano fue uno de los principales textos que fueron estudiados hasta por San Benito. Más tarde se extrajo de sus escritos una «Regula Cassiani».
E. Alpino