[Min son pa galejan]. Relato humorístico del sueco Jacob Wallenberg (1746-1778), compuesto durante su primer viaje a las Indias Orientales, en los años 1769-71 e impreso, póstumo, en 1781.
Narra las aventuras ocurridas al joven Jacob, embarcado en una galera, durante un viaje a China que duró ocho meses entre innumerables contrariedades y peligros. Los marineros, después de haber pasado los días anteriores a la partida en continuas francachelas ofrecidas por los amigos o lloriqueando junto a la novia, zarpan por fin; pero muy pronto, cerca de las costas de Escocia, son azotados por una tormenta espantosa. Salvados por milagro, prosiguen el viaje y, en las costas de África, encuentran a los piratas. Las mentes de los jóvenes sueñan ya en empresas aventureras y princesas libertadas, pero la realidad se les presenta mucho menos romántica y se reduce a algunos disparos. La vida a bordo está descrita con todos sus detalles: la comida abundante y siempre bien recibida, la señal de la distribución del aguardiente, apreciado como lo mejor del mundo, la distribución del ponche. Después de haber desembarcado en Java, armados y dispuestos a defenderse de tigres y serpientes, llegan finalmente a Cantón, pero aún no encuentran la tranquilidad, porque de los dieciocho navíos, anclados parte una serie de salvas de disparos que envuelven el puerto en negras nubes de humo.
El libro, entremezclado de pasajes y consideraciones patrióticos y moralizadores y adornado con reminiscencias clásicas, disfrutó durante largo tiempo, en Suecia, de cierta popularidad.
A. Ahnfelt