anticomedia en 11 escenas
En un interior burgués, típicamente inglés, el matrimonio Smith conversa, enunciando una serie de constataciones banales tal y como las que pueden ser encontradas en los manuales de estudio de una lengua extranjera. Cuando Mary, la doncella, regresa del cine, anuncia que en la puerta se encuentran los esposos Martin. Éstos entran, toman asiento uno enfrente del otro, como si no se conocieran, e intercambian un original diálogo; los cónyuges caen en la cuenta de que lo son sólo después de que en sus ocurrencias se han ido acumulando circunstancias que así lo prueban.
De súbito, irrumpe un bombero en busca de un incendio que dominar. Cuando éste se retira, los cuatro personajes hilvanan una conversación llena de lugares comunes. Luego el ritmo se vuelve más apremiante: los cuatro vociferan ocurrencias con los puños levantados, dispuestos a abalanzarse los unos sobre los otros. Las frases terminan convirtiéndose en sonidos carentes de sentido, en asonancias, en vocales y consonantes aisladas. Las luces se apagan. Cuando se vuelven a encender, la comedia recomienza con los Martin sentados en el puesto de los Smith y diciendo sus mismas ocurrencias iniciales. Va cayendo el telón lentamente.