Poema en seis cantos de Walter Scott (1771-1832), publicado en 1813. A diferencia de La dama del lago (v.), este poema se acerca a la novela de caracteres.
La escena se sitúa principalmente en Rokeby, Yorkshire, en el confuso período que siguió a la batalla de Marston Moor (1644). Una intriga privada ocupa el primer plano: Oswald Wycliffe, señor del castillo de Barnard, conspira con el forzudo Bertram Risingham, hombre de pocos escrúpulos, para asesinar al patrón de éste, Philip de Mortham, y apoderarse de las tierras y el tesoro que ha ganado en la América española. Mortham es herido y pasa por muerto, pero sobrevive. Un ataque al castillo de Rokeby, para conquistar el tesoro, es rechazado gracias a las proezas del joven Redmond O’Neale, paje de lord Rokeby.
Entretanto, Oswald, a quien ha sido entregado lord Rokeby como prisionero después de la batalla de Marston Moor, amenaza con asesinar a éste si su hija Matilde no accede a casarse con Wilfrid, hijo de Oswald, jovencito humilde y delicado que se niega a aprovecharse del forzado consentimiento de Matilde. (En Matilde, Scott quiso plasmar su antigua pasión por Margaret Stuart Belches, que luego se casó con el banquero William Forbes; la misma muchacha está retratada en otras heroínas de Scott). Precisamente en el momento en que lord Rokeby va a ser asesinado, llega Bertram, presa del remordimiento, y mata a Oswald, muriendo él mismo. Se descubre que Redmond, el cual se casa con Matilde, es hijo de Mortham, a quien se creía muerto. Después de Rokeby, que tuvo un lisonjero éxito, Scott, eclipsado por el numen poético de las Novelas en verso de Byron (v. El Corsario, Giaur, etc.), dedicó sus talentos a la novela. [Trad. española de M. de Rementería y Fica con el título Matilde de Rokeby (Madrid, 1829)].
M. Praz
Como poeta, Scott no sobrevivirá porque no ha escrito nada que se refiera a la parte inmortal del hombre. (Wordsworth)