Es el primer libro del poeta murciano Salvador Jacinto Polo de Medina (1603-1676) publicado en 1630. Es en realidad una miscelánea de versos propios y ajenos, reflexiones morales y crítica literaria y social. Su artificio consiste en suponer la celebración de unas Academias, o reuniones literarias, en el jardín o quinta de los Marqueses de Espinardo, poco distante de la ciudad de Murcia, manera muy corriente en el siglo XVII de ensamblar especies y trozos literarios inconexos, incluso novelas y comedias en ocasiones. Las Academias del jardín tiene, aunque sin complicación ni secuencia novelesca, un rudimento de asunto, argumento o acción. Los amigos que se reúnen en cultas tertulias lo hacen para divertir los pesares de Anfriso, víctima de los desdenes de Filis. Para consolar sus penas y preocupaciones amorosas, se hacen versos, fingen torneos y organizan juegos y diversiones variados. Al final, e inesperadamente, un náufrago recogido en la quinta trae la noticia de la muerte del competidor de Anfriso y pronóstico cierto de la dicha del galán. Festéjase el caso con parabienes y buenos deseos y, sobre todo, con un espléndido epitalamio de Jacinto. Con la promesa de segunda parte termina el libro. Las reuniones deben tener un fondo histórico, y sería curioso identificar los personajes que figuran con nombres fingidos, especialmente para saber los autores de las poesías, muchas muy notables, que en el libro se incluyen. En una defensa de la importancia literaria de su ciudad, nos da Polo de Medina un catálogo de los escritores que la ilustraban y hasta una antología de sus composiciones poéticas.
J. M.ª de Cossío