Nació en Aslacton (Nottinghamshire) el 2 de julio de 1489 y murió en la hoguera el 21 de marzo de 1556.
Reformador y obispo anglicano, estudió y luego enseñó Teología en Cambridge. Participó activamente en la vida política y religiosa de su tiempo; la formación de la fe anglicana debe mucho a su labor.
Nombrado arzobispo de Canterbury y confirmado por el mismo papa Clemente VII, al cabo de algún tiempo declaró públicamente no juzgar válido el juramento de fidelidad prestado al pontífice y, secundando el deseo de Enrique VIII de invalidar su boda con Catalina de Aragón, estableció un proceso adecuado y declaró nulo aquel matrimonio.
Después anduvo siempre mezclado en los asuntos conyugales del rey, supo contemporizar hábilmente y, aun cuando acusado por tres veces de herejía, se salvó incluso tras la caída de Thomas Cromwell.
Muerto Enrique VIII, figuró en el Consejo de regencia de Eduardo VI; pero al participar en la conjuración urdida para sentar en el trono a Jane Gray en vez de María Tudor, fue descubierto y condenado a la hoguera como hereje. Sólo en esta circunstancia aparece su figura un tanto ennoblecida; por lo demás, la existencia de C. conoció episodios nada edificantes.
Se le debe la compilación del Libro de la oración común, redactado en 1549 en un inglés en que quedan perfectamente amalgamados los elementos sajones y franceses del idioma y armonizada la solemnidad del texto con el lenguaje corriente. El nombre de C. se halla vinculado también a la Gran Biblia (v.), debido a su labor en esta versión del libro sagrado, aparecida muchos años después de su muerte.
M. Colombi Guidotti