Nació el 7 de mayo de 1676 en Ischitella, murió el 17 de marzo de 1748 en Turín. Se licenció en derecho civil y canónico en Nápoles (1698), ejerciendo a continuación la abogacía. Pero interesado vivamente por la cultura europea, introdujo en el ámbito de la floreciente tradición jurídica meridional ideas totalmente nuevas.
Convirtió en un gran problema histórico la polémica jurídica contra las injerencias políticas y económicas de la Iglesia, muy onerosas en el reino de Nápoles, problema que consistió en mostrar el modo como había nacido y se había desarrollado el poder eclesiástico, remontándose hasta sus orígenes, y en reconstruir la lenta formación de las modernas fuerzas capaces de oponerse a él. Así se unían idealmente los episodios del virreinato de Nápoles con los de Europa. A esta obra grandiosa se consagró durante veinte años (1702-22): de ello nació la Historia civil del reino de Nápoles (V.). Pero surgieron inmediatamente las primeras desilusiones: atacado por los elementos eclesiásticos, excomulgado, puesta su vida en peligro por el populacho atizado contra él, mal protegido por la autoridad civil y por sus mismos amigos, hubo de huir precipitadamente y refugiarse en la corte de Viena.
Allí compuso su otra gran obra, Los tres reinos (v.). En 1734 la conquista hispano-borbónica del virreinato le hizo perder el subsidio; abandonó Viena; perseguido por la Curia, se refugió en Ginebra, A pesar de que siempre sostuvo la posibilidad de conciliación de sus tesis con el catolicismo, la persecución continuó. Habiéndose trasladado a la católica Saboya para cumplir el precepto pascual, cayó en una emboscada y fue encarcelado. En la cárcel de Miolans compuso su Autobiografía; sometido a presiones de todo género, suscribió la abjuración de sus tesis (1738). Reanudó entonces sus estudios; redactó nuevas obras, que quedaron en gran parte inéditas. Trasladado de nuevo a Turín, murió en la cárcel de la ciudadela de esta ciudad en 1748.
B. Vigezzi