Nació en 1805 en la provincia de Poltava y murió el 6 de noviembre de 1874 en su propiedad de Gorishyn (provincia de Gorodnensk). Miembro de la antigua nobleza cosaca (en 1610 sus antepasados ocupaban todavía puestos de importancia en el ejército cosaco de Zaporojje), estudió en la escuela militar de San Petersburgo, y sirvió durante muchos años en el ejército ruso. Luchó heroicamente contra los turcos y fue herido, y obtuvo la cruz de San Jorge, la condecoración rusa más alta por méritos de guerra. Luego se retiró a Gorishyn, donde permaneció hasta su muerte. Aun cuando la vida militar le llevara largos años fuera de Ucrania, estuvo siempre vinculado a su país y a su pueblo. La actividad literaria de Storojenko en lengua ucraniana, iniciada en torno a 1861, duró breve tiempo.
Irritado por las críticas del periódico ruso Sovremennik, el autor abandonó el idioma de su tierra y empezó a escribir en el de Rusia, en el cual, empero, no alcanzó el nivel artístico de sus obras precedentes. No se unió al movimiento literario ucraniano de su época, inspirado en los problemas del presente y en la realidad contemporánea, y, así, tendió al pasado. Con emotivo lirismo, un humor sutil y excepcionales dotes de estilista, dio nueva vida a figuras de la historia y de la fantasía popular de su país. La obra más importante de Storojenko es Marcos el maldito (v.), evocación de un personaje semimítico reconstituido por el escritor a base de las leyendas y tradiciones populares reunidas por él «mismo a lo largo de treinta años de pacientes indagaciones. Nuestro autor cultivó también la música, la pintura y la escultura, y en esta última actividad obtuvo algunos reconocimientos oficiales.
M. Lipovetzka