Juan de Salisbury

(Johannes Saresberiensis). Nació en Salisbury entre 1110 y 1120, murió en Chartres en 1180. Fino escritor, docto en Teología y en Filosofía, de vasta cultura clásica — se ha discutido si conoció también el griego — y robusto pensador, J. de S. es uno de los mayores representantes del hu­manismo medieval. Estudió en París, en 1136, con Abelardo, y en Chartres; vuelto a In­glaterra en 1150, se le nombró secretario del arzobispo de Canterbury, Teobaldo, y fue encargado por el rey Enrique II de nume­rosas misiones. Viajó por Italia y quizá recibió en Roma, del papa Adriano IV, la bula que autorizaba a Enrique a conquistar Irlanda. J. de S. conservó también el cargo de secretario con el nuevo arzobispo Tomás Becket (1162) y, cuando éste entró en con­flicto con el rey y se vio obligado a huir de Inglaterra, J. de S. le siguió a Francia. En Reims, a donde se retiró, se dedicó a la redacción de la Historia pontificalis.

Vuelto con Tomás a Inglaterra en 1170, y después que el arzobispo fue asesinado en la cate­dral de Canterbury por algunos caballeros del rey, J. de S. escribió su vida, propug­nando su beatificación: Tomás Becket fue, en efecto, canonizado por el papa Alejan­dro III en 1173. Al mismo Tomás Becket había dedicado J. de S. su Policrático (v.), en el que, tratando de moral y de política, manifestaba todo su amor por la cultura y por las «litterae», entendidas como expre­sión de humanismo; también escribió J. de S. en elogio de su arzobispo un poema de 962 dísticos, el Entheticus de dogmate phi- orum. En 1176 fue elevado J. de S. a la cátedra episcopal de Chartres, y en esta ciudad se extinguió cuatro años más tarde. Además de las obras citadas, se le debe también el Metalógico (v.), en el que de­fiende la lógica como instrumento de la ver­dad, una vida de Anselmo y unas trescientas cartas a amigos, cortesanos y eclesiásticos.