Nació en Southport (Inglaterra) el 11 de septiembre de 1877 y murió en 1946 en el condado de Dorking. Fue alumno del «Trinity College» de Cambridge, y más tarde profesor de Matemáticas aplicadas en la Universidad de Princeton, en los Estados Unidos. Luego volvió a Inglaterra, y en 1935 viose nombrado profesor de Astronomía de la «Royal Institution». Sus estudios, singularmente astronómicos, le valieron muchos premios, entre ellos la medalla de la «Royal Society», conseguida en 1919; este año fue elegido secretario honorario de la misma entidad. En realidad, destacó sobre todo en las Matemáticas aplicadas; trabajó en la resolución de los más elevados problemas de la Física teórica y, también, de la Astronomía y la Cosmogonía.
Sus obras principales se refieren a la evolución de los cuerpos celestes, y en particular a la estabilidad de las masas fluidas, con o sin rotación. J. amplió sus investigaciones hacia la Dinámica estelar, los movimientos de las estrellas en los cúmulos de éstas, el origen de la energía de los astros y las nebulosas planetarias y en espiral. Maestro en la técnica matemática, no se dejaba, empero, dominar por ella, y no abandonaba nunca por completo el punto de vista físico. En su tratado La teoría dinámica de los gases [The Dinamical Theory of Gases, 1904] aparece expuesta la teoría cinética de los gases. En 1906 publicó en Princeton el Tratado elemental de matemática teórica [Elementary Treatise of Theoretical Mathematics], y en 1908 la Teoría matemática de la electricidad y del magnetismo [Mathematical Theory of Electricity and Magnetism). En el ámbito astronómico son muy conocidos sus volúmenes Problemas de cosmogonía y dinámica estelar [Problems of Cosmogony and Stellar Dynamics, 1919] y Astronomía y cosmogonía [Astronomy and Cosmogony, 1928], que impulsaron y mejoraron notablemente los ulteriores estudios sobre la estructura del Universo.
Del campo sólo teórico supo pasar con profundidad de visión y elegancia de estilo a la divulgación de la Astronomía en diversos y apreciados libros, traducidos a numerosas lenguas: El universo que nos rodea (1929, v.), Las estrellas en su curso [The Stars in their Courses], El universo misterioso (1930, v.) y Física y filosofía [Physics and Philosophy, 1942]; en esta última obra expone argumentos contra la filosofía tradicional, y atribuye muchas de sus diferencias con la física al hecho que una y otra ciencia emplean lenguajes distintos.
G. Abetti