Trovador provenzal, que vivió en Tolosa del Languedoc en el siglo XIV, y fue tal vez síndico de esta ciudad en 1352. Guilhem Molinier participó en la creación del «Consistori del Gai Saber», del cual fue nombrado canciller con la misión de establecer las reglas del arte en un código de leyes poéticas. A petición suya estuvo asistido por un consejero en la persona de Bartomeu March, doctor en Derecho, y se le autorizó para recurrir a la Academia en los casos dudosos. El conjunto de esta compilación que comprende una poética, una gramática y un tratado de figuras se tituló Leyes de amor (v.). Más tarde el mismo Guilhem Molinier compuso un compendio de las Leyes en 7.000 versos bajo el título de Flors del Gai Saber.