Friedrich Engels

Nació en Barmen el 28 de noviembre de 1820 y murió en Londres el 5 de agosto de 1895. Era hijo de un fabri­cante de tejidos luterano y pronto llegó a ser un fervoroso hegeliano de izquierdas, o sea de tendencias inmanentistas antiteoló­gicas.

Inclinado ya al socialismo, conoció en 1844 a Karl Marx; la comprobación de la afinidad de la evolución intelectual de ambos dio lugar a la famosa amistad ba­sada en las luchas y la actividad política y científica comunes.

En este último as­pecto cabe mencionar; Rasgos generales de una crítica de la economía política (1844), La situación de la clase obrera en Ingla­terra (1845), la publicación conjunta de la obra filosófico-política La sagrada familia (1845, v.), la elaboración común del Mani­fiesto del Partido Comunista (1848, v.), la activa colaboración de Marx a la prepara­ción de El capital (a la que Engels llevó tam­bién su experiencia de industrial) y la labor editorial de nuestro autor en la publicación del segundo y el tercer tomos de esta obra una vez fallecido Marx.

A pesar de la mo­desta expresión de Engels, al declararse sola­mente expositor y divulgador del pensa­miento común, que critica y científicamente fue elaborado por su compañero, debe considerarse suyo el notable éxito La revo­lución científica del señor Engels Dühring (denominado Antidühring, 1878, y en el cual figura un capítulo de Marx), donde la po­lémica con Dühring es sólo un pretexto y la doctrina del materialismo histórico y dia­léctico aparece elaborada y sistematizada filosófica e históricamente.

La correspon­dencia casi cotidiana entre Engels, quien hasta 1870 trabajó en la industria paterna de Man­chester, y Marx, en Londres, permite cono­cer la actividad indirecta de aquél en la Primera Internacional, directa después de 1870, sobre todo respecto de Italia y Es­paña, y también las relaciones ininterrum­pidas con la socialdemocracia alemana. A partir de 1880, Engels publicó algunas obras teórico-históricas (El origen de la familia, de la propiedad privada y del Estado, 1884, v.); L. Feuerbach y el fin de la filosofía clá­sica alemana, 1888), así como varios prólogos para las nuevas ediciones del Manifiesto, las obras suyas y de Marx hacia el 1848 en Francia y alemania, las de este último de 1870-71 acerca de la guerra franco-prusiana y la «Commune», y otros textos.

La misión de tales prefacios es no sólo histórica, sino también política: se trata de vínculos de la socialdemocracia alemana y del movimien­to obrero y socialista internacional con el espíritu revolucionario realista original, y también de nexos conscientes entre la tra­dición política e intelectual anterior a 1848 (y asimismo hegeliana, a pesar del interés de Engels por el positivismo, como lo demues­tra la publicación de las Tesis sobre Feuer­bach de Marx, del texto de la Ideología alemana, obra común de los dos compa­ñeros, escrita en 1846 y no editada hasta 1933) y la ideología y la práctica del movi­miento socialista del nuevo período histó­rico (cabe mencionar aquí las cartas de Antonio Labriola a Engels y las de éste a Turati, muestras de una vasta correspondencia.

Esta actividad sistemática política de guía del movimiento socialista y de la Segunda Internacional no alejó nunca por completo a Engels de su interés inicial por los estudios filosóficos, entendidos incluso en sentido es­tricto; a los cuarenta años de su muerte fue publicada la Dialéctica de la naturaleza, donde el autor, en respuesta a los proble­mas de la filosofía positivista, procura esta­blecer las bases de una síntesis de la ideo­logía científica.

Partícipe directo en los in­tentos de insurrección de los años 1848-49 en alemania como miembro activo de una organización libre, Engels, de acuerdo con la tradición alemana, se preocupó muy pronto del aspecto militar de la vida política y siguió haciéndolo incluso cuando la solu­ción militar-rebelde de la lucha política se vio superada después de 1870 por las nue­vas técnicas; entre sus estudios bélicos son todavía famosos los de las campañas ita­lianas de 1859-60 y de la francesa de 1870.

D. Cantimori