[Mémoires secrets sur le règne de Louis XIV, la Régence et le règne de Louis XV]. Obra histórica de Charles Pinot Duelos (1704-1772), publicada después de su muerte en 1791. Casi coetáneo de Luis XV, el autor ilustra con agudeza la ruinosa política del Rey Sol que al morir dejó abandonada a Francia entre los más graves problemas de política exterior e interior que la Regencia trató con grandes dificultades de remediar.
Las páginas sobre la vida de Luis XIV son bastante agudas, aunque estén escritas en tono malévolo y áspero: los vicios y las debilidades del monarca, su tendencia a ceder a la influencia de los jesuitas, las intrigas en los asuntos de España y su megalomanía de estadista y de caudillo condujeron a Francia al borde de la ruina. La influencia del jesuita Padre Tellier, que sucedió al suave La Chaise, agravó la situación; baste recordar la destrucción de Port-Royal, la persecución de los jansenistas y la revocación del Edicto de Nantes. La misma escena de la muerte del rey, mientras el Padre Tellier y los demás jesuitas tratan de impedir que hable con el cardenal de Noailles (arzobispo de París, tan combatido por él en el asunto de las prerrogativas reales frente a la Iglesia), tiene algo de sombrío y dramático que podría por sí solo testimoniar la crisis del reinado. Pasando al período de la Regencia, Duelos traza el retrato de Felipe de Orleáns (1674-1723), que muestra las mayores simpatías hacia el Parlamento y las libertades populares, y acaba con la influencia de los jesuitas que muy pronto son desterrados de Francia.
Grave es la sitúación política en relación con la Iglesia: el cardenal de Noailles resistiendo honradamente a la intromisión monárquica del Regente, y Dubois, adulándolo bajamente, colaboran a crear un estado de pánico en las relaciones entre Francia y el Papado. La muerte del Regente y la coronación del joven Luis XV ofrecen ocasión de sistematizar la política de la nación. Pero luchas políticas, asuntos de Corte, amores y tratados ruinosos, caracterizan también el reinado de Luis XV, a pesar del movimiento intelectual y de las nuevas necesidades de vida social. Duelos, que narra con mucha viveza anécdotas y hechos de la Corte, quiere representar la historia «secreta» indagando, entre los bastidores de la vida de los diversos soberanos, la causa de momentos históricos considerados de otro modo como inexplicables según la lógica de las cosas. Se aproxima a Saint-Simon por la agudeza del juicio y la despreocupación incluso maligna de las observaciones; y no hay que olvidar que, sirviéndose precisamente en la Corte de las Memorias (v.) manuscritas e inéditas de Saint-Simon (a quien llama «ebrio hasta la locura de su título de duque y de par»), el autor se entretiene narrando con acre sutileza de cronista los acontecimientos de- la Corte, las conversaciones, los tratados secretos y los odios entre las mismas personas de la familia real. La fama de esta obra ha ido menguando con el conocimiento más directo de Saint-Simon; sin embargo, conserva cierto valor por la viveza del estilo y los escorzos de la narración histórica.
C. Cordié
Las Memorias de Duelos sólo han salido perdiendo con la inmediata proximidad de Saint-Simon. (Villemain)
Incapaz de captar los grandes movimientos del alma, Duelos se supera en cambio destacando y comprobando las manías pasajeras del espíritu de sociedad, como un buen médico empírico que advierte una variedad epidémica, Una enfermedad de estación. (Sainte-Beuve)