[Les Fourchambault]. Comedia en cinco actos de Émile Augier (1820-1889), representada en 1878. Augier quiere combatir aquí el materialismo burgués característico de fin de siglo. Y, puesto que esta actitud hace del dinero la medida de todas las cosas, especialmente cuando se habla de matrimonio, Augier demuestra que la única condición esencial para la felicidad en los esposos es el afecto recíproco. Fourchambault, rico burgués, ha amado y seducido, de joven, a una pobre muchacha profesora de música, abandonándola luego junto con el hijo nacido de este amor, para casarse con una muchacha rica, de la que sólo conoce la cifra de su dote. El hijo que nace de este matrimonio crece abandonado a sí mismo en un ambiente falto de afecto, y pasa agradable y ruinosamente sus días entre campos de carreras y salas de juego. Víctor, el hijo ilegítimo, criado con infinito amor por su pobre madre, ha presenciado las humillaciones que ella ha soportado, las luchas que ha tenido que librar, y ha sabido crearse una situación y un patrimonio. Reducido a la quiebra por las disipaciones de su hijo y de su mujer, y por el desorden que reina en su familia, Fourchambault es salvado por Víctor, que conoce su origen. El contacto con este joven honesto y sano es beneficioso para el hijo legítimo; también la señora Fourchambault abandona su vanidad mundana. Es ésta la última comedia escrita por Émile Augier, notable por la fuerza de los caracteres y el dramatismo de las escenas, a través de las cuales el autor persigue lo que es el fin de toda su obra: la exaltación de la familia, fundada en el amor y en el trabajo.
G. Alloisio