La Vida del Hombre, Daniello Bartoli

[Žizn’ čeloveka]. Drama en cinco cuadros con un pró­logo, de Andreiev (Leonid Nikolaevic Andreev, 1871-1919), publicado en 1906 y estre­nado en 1908. Es el drama simbólico más importante de este escritor, atrevida tenta­tiva para tipificar abstractamente la vida hu­mana prescindiendo de concretarla en perso­najes vivos y reales.

En el prólogo «Alguien de gris», llamado «El», habla de la vida del hombre y anuncia el desenvolvimiento de los cinco cuadros: «El nacimiento del hom­bre», «El amor y la pobreza», «La fiesta de baile», «El hombre en la desventura» y «La muerte del hombre». Obra de pleno carác­ter simbolista, La vida del hombre suscitó muchas controversias críticas: por una parte viendo algunos el colmo de la habilidad en saber poner al hombre, lector o espectador, ante sus problemas eternos, revelándole simbólicamente su esencia; por otra parte, considerando otros que el drama no era más que un juego o un artificio. El éxito teatral de la obra fue’ de todas maneras extraordinario gracias, sobre todo, a la ori­ginal escenificación de Meyerhold en el teatro de la Kommissarzevskaja, que aspi­raba no tanto a ofrecer algo nuevo a toda costa, cuanto a confiar a la escena el come­tido de revelar las más misteriosas profun­didades del alma.

Superado el período del simbolismo, La vida del hombre ha desa­parecido casi del repertorio teatral; con todo, queda todavía como prueba de uno de los más nobles y originales esfuerzos de re­novación del teatro, aunque fundado sobre un pesimismo casi desesperado.

E. Lo Gatto