[La filie de Madame Angot]. Opereta de A. Charles Lecocq (1832-1918) con texto de Clairville, Siraudin y Koning, estrenada en Bruselas en 1872. Es la más popular de las numerosas operetas compuestas por uno de los más geniales continuadores de Offenbach. Después de haber alcanzado la primera representación en Bruselas un éxito extraordinario, la opereta se representó en París (Folies-Dramatiques, 1873) y recorrió toda Europa por espacio de varios años. También en Italia se representó repetidas veces durante la postguerra (1918-1920).
La hija de Madame Angot es Clairette, bonita florista a la que algunos señores han tomado bajo su protección y quieren casar con el peluquero Pomponnet; pero la muchacha está enamorada del canzonetista Ange Pitou, un libertino que, después de haber ilusionado a Clairette, se abandona en brazos de Mademoiselle Lange, célebre actriz. La pobre florista se desespera y va al encuentro de una serie de contratiempos, llegando al extremo de ser detenida y encarcelada por haber cantado una tremenda canción satírica contra su infiel amante. Pero al fin se consuela y acepta al bueno y honrado Pomponnet. El público estimó mucho en esta obra la frescura del tema y el brío de las canciones. Además, Lecocq, el músico más refinado y culto entre los compositores de opereta de este período, cuidó la forma y la instrumentación con gran sensibilidad y conciencia. En poco tiempo, la Hija de Madame Angot tuvo, solamente en París, más de dos mil representaciones. Los trozos mejores de la opereta son: «Très jolie, peu jolie», el coro «Quand on conspire», el vais «Tournez, tournez» y la escena final del tercer acto.
L. Rognoni