Una de las derivaciones más literales de la «danza» poemática de nuestro siglo XV, es una obra de espíritu completamente popular del autor segoviano Juan de Pedraza. Compuso su obra (1551) en estrofas de arte mayor, salvo la loa, ateniéndose a su modelo. «Farsa llamada Danza de la Muerte, en que se declara cómo a todos los mortales, desde el papa hasta el que no tiene capa, la Muerte hace en este mísero suelo ser iguales, y a nadie perdona; contiene más: como cualquier viviente humano debe amar la razón, teniendo entendimiento della, considerando el provecho que de su compañía se consigue. Va dirigida a loor del Santísimo Sacramento. Hecha por Juan de Pedraza, tundidor, vecino de Segovia». Tal reza en su principio la obra; y, en efecto, presenta a un papa, un rey, una dama y un pastor, en «siluetas dignas de un grabado germánico» (V. P.). Todos estos personajes son sorprendidos en sus adecuados lugares por la Muerte. La Razón, la Ira y el Entendimiento intervienen al final, dando la explicación moral del drama, sobrio y animado. El texto, así como las notas que a él puso González Pedroso, puede consultarse en el tomo LVIII, pág. 41, de la «Biblioteca de Autores Españoles».
C. Conde