Poema narrativo en octavas del poeta español Cristóbal de Virués (1550-1609), publicado en Milán en 1587. El motivo deriva de las leyendas eclesiásticas españolas del siglo IX. El ermitaño . Garín, que vive en las inhóspitas laderas de la montaña de Montserrat, en Cataluña, viola y mata a la hija del conde de Barcelona, que le habían confiado para que la liberara del demonio. El arrepentimiento le obliga a abandonar su ermita y dirigirse a Roma para pedir la absolución al Papa. Después de unas complicadas aventuras por tierra y por mar, Garín llega a Roma, y el Pontífice le absuelve con la condición de que vuelva a gatas a su ermita y allí se alimente de hierbas y raíces hasta el día en que un niño le anuncie el perdón del Cielo. El milagro se cumple al cabo de siete años; Mirón, un niño de tres meses, hermano de la joven que fue víctima del extravío de Garín, le dice entre el estupor de los presentes: «¡Levántate, Garín, Dios te ha perdonado!» Garín confiesa al padre de la víctima su crimen y le acompaña al lugar donde siete años antes había enterrado a la infeliz muchacha. Ésta, sacada de su tumba, resucita y, consagrándose a Dios, funda en Montserrat el famoso convento. El poema tuvo un gran éxito durante más de un siglo, y fue traducido a los principales idiomas europeos; efectivamente, sus veinte cantos muestran una gran habilidad técnica y unas felices dotes psicológicas, que permiten a Virués construir unos personajes bastante consistentes. El poeta elaboró nuevamente la obra con el título El Monserrate segundo (Milán, 1602).
A. R. Ferrarin