Tom y Maggie son hijos de Tulliver, propietario de un molino junto al río Floss. Los dos jóvenes se adoran, pero son distintos de carácter: Tom es prosaico y un poco limitado, Maggie, inteligente, pasional y sensible. La muchacha encuentra un alma gemela en Philip, el hijo del abogado Waken, deforme y achacoso: cree amarlo, pero en realidad lo que siente por él es tan sólo compasión.
Tulliver, sin embargo, está enfrentado a Waken y Tom prohíbe a Maggie seguir viéndose con Philip. Tras la muerte de su padre, la muchacha se va a la vecina S. Oggs, huésped de su prima Lucy Deane, que está prometida con Stephen Guest. Maggie y Stephen se sienten atraídos el uno por el otro: una excursión en barca, no obstante su inocencia, compromete a la muchacha, que, sin embargo, se niega a casarse con Stephen.
Tom la expulsa de casa y la entera sociedad de provincias la condena. Una noche llega la inundación: Maggie, que es la primera en advertir la amenaza que se les viene encima, salva a su hermano. Pero luego vuelca su barca y los dos jóvenes se ahogan, abrazados.