El episodio central del Mito de Etana, babilónico y asirio, consiste en el vuelo de este héroe, agarrado al cuello de un águila, hasta el cielo de Istar. Etana se había hecho amigo de un águila, que por haberse comido sin justificación alguna los pequeños de una serpiente había sido castigada por ésta, por consejo del dios del Sol, y arrojada a un foso. Etana había alimentado allí al águila y ésta, a quien Etana pide la llamada «hierba del buen parto» para su esposa, le dice que ésta se encuentra en el cielo y le invita a volar con él para conseguirla. El héroe se agarra al cuello del águila y así llegan a la puerta de Anu, Enlil y Ea. Después suben más arriba todavía, al cielo de Istar. Pero Etana mira hacia abajo, le acomete el vértigo, cae, y en su caída arrastra consigo al águila. Etana muere y su sombra aparece a la esposa. En la leyenda es celebrado como rey.
G. Furlani