[Disptutationes dialecticae]. Tratado dividido en tres libros y compuesto en latín en 1439, por el humanista, llamado también Valla (1407-1457). Es ciertamente uno de los documentos más importantes de la lucha contra el aristotelismo, aunque el autor combate con tal viveza que a veces parece no dar exactamente en el blanco. Ya Petrarca, amigo de una cultura interior y límpida, detestaba de los silogizadores de su tiempo y su bárbaro latín: la filosofía es amor a la ciencia por su origen divino y no un vano sutilizar sobre definiciones y teoremas.
Es preciso por tanto, eliminar las definiciones inútiles y reconstruir una dialéctica sencilla y viva, verdadera guía para llegar a la verdad. Con su animoso proceder, confunde Valla a Aristóteles y a los aristotélicos en un mismo grupo. Reduce a uno solo los seis «principia» de Aristóteles y a tres las diez categorías. En cuanto al silogismo, talón de Aquiles de la cultura medieval, demuestra la insuficiencia y el error de muchas formas acogidas supinamente por los escolásticos. Aunque el maestro de «todos los sabios» esté aquí mal comprendido en su significado histórico y hasta mal conceptuado en relación con su valer, el tratado es bastante importante por su posición crítica, que afirma la necesidad de no fiarse de la tradición, por acreditada que sea y de discutir valientemente los problemas del saber con el fin de proceder con verdadera libertad de pensamiento.
C. Cordié