[Journal intime]. Publicado en 18#7 según un texto mutilado, y ahora devuelto por Mistler (Munich, 1945) a su carácter genuino de confesión y de memorias, tiene importancia decisiva entre las obras literarias de Henri- Benjamin Constant de Rebecque (1767-1830), junto al Adolfo (v.). El análisis agudo y a veces morboso de sus pasiones, aparece en anotaciones que van desde 1804 a 1816, años inquietos y turbios de exilio y de lucha, de amor y de lamentaciones. Pasada la juventud, y habiendo probado estudios y amores, Benjamín recoge los frutos de su educación varia y desordenada de hombre libre: pasa por la sociedad con la voluntad de un racionalista y con la pasión de un libertino incomprendido.
Todo es experiencia para sus ojos sagaces: encuentros, contrastes, aspiraciones. Poco a poco se hace luz en él, al contacto con Mme. De Staél, en las contrastadas vicisitudes de su famosa relación, en la meditación de los nuevos principios políticos para dar una tregua a Europa, se va construyendo un mundo de obras y de fe. Pero este hombre que se confiesa con la mente cansada de placeres y con el anhelo insatisfecho de nuevos conocimientos, parece mostrarse aquí en toda su debilidad y con un análisis despiadado de las insuficiencias humanas. Con verdad y con soltura —de modo espontáneo viene aquí la referencia al Ober- mann (v.) y al René (v.), héroes de un malestar de la época, apenas aliviado en Constant por las aspiraciones políticas — examina el mundo contemporáneo, desde la sociedad a la literatura, desde las figurillas de ocasión hasta los personajes de primer plano. Pero siempre está él, Benjamín, ávido de conocer hasta la razón secreta de su propio corazón, entre amoríos, matrimonios, desacuerdos y luchas. En conjunto, es un libro inconfundible al que sólo se puede comparar el Diario (v.) de un Stendhal.
C. Cordié