Crónica de los Emperadores Romanos

[Cronaca degli imperatori romani]. Compuesta en lengua vulgar veneciana, en 1301, es una de las más singulares mani­festaciones de los escasos escritos históri­cos no florentinos de principios del si­glo XIV. En esos años sólo los grandes cronistas florentinos usaban ya, y con admi­rable eficacia, la lengua materna para trans­mitir memorias patrias, mientras que por todas partes se usaban todavía versos latinos, como había hecho Stefanardo da Vimercate, o insulsa prosa latina, como Galvano Fiamma en el Manipulus Florum y en sus otros centones. Esta compilación en dia­lecto italovéneto es, por lo tanto, fruto primicial nacido fuera del vergel toscano. Pero en contraste con los toscanos, en esta crónica el candor del compilador no con­sigue dar a la expresión un relieve tal que nos obligue a prescindir de los intereses del filólogo y del dialectólogo y a conside­rar alguna página al menos como obra de arte. Vio la luz en Bolonia bajo el cuidado de A. Ceruti, en 1878, en el vol. III del «Archivio Glottologico», y este detalle con­firma nuestro juicio.

G. Franceschini