[Entretien d’un philosophe avec la Maréchale de *]. Diálogo de Denis Diderot (1713-1784), que se publicó en el año 1776, sin nombre de autor. El filósofo (que es naturalmente el mismo Diderot), está indicado con el nombre de «Crudeli»; la Maríscala quiere ser en realidad la esposa del mariscal de Broglie, que fue encargado por la corte en 1789 del intentado acto de violencia contra la asamblea de Versailles. El Filósofo imagina estar conversando con esta señora de rara belleza y virtud, mientras esperan a su marido, en su palacio. La conversación no tarda en versar acerca de la religión, porque la dama le ha acusado de impiedad, y él se defiende con su acostumbrada ingeniosidad, contraatacando. Asistimos así a una rápida polémica contra el principio de que la fe, y más aún, una determinada doctrina religiosa, es el único y verdadero sostén de la moral; a lo que Diderot opone la muchedumbre de religiones, en el espacio y en el tiempo, y la persistencia, a pesar de esto, de ciertos principios morales universales inspirados por la naturaleza.
En la selección de los argumentos, en las objeciones y deducciones, a decir verdad, el autor no se muestra aquí muy original, y recurre al acostumbrado y fácil repertorio volteriano, sin distinguirse osadamente del pensamiento común de su tiempo, como le sucedió en cambio en otros muchos escritos suyos. El diálogo debe su notoriedad únicamente al tono particular que Diderot supo imprimir a sus ataques: manteniéndose igualmente alejado de ciertas indignadas declamaciones y de un frío cinismo negador, polemiza con grave audacia y con sonriente humanidad que ha dado a estas breves páginas el sello de la vida.
M. Bonfantini