[The Lamentable and True Tragedie of Arden of Feversham]. Drama en cinco actos de autor desconocido, publicado en Londres en 1592, y atribuido a Shakespeare por varios críticos, entre los cuales está Swinburne. Arden deriva de un suceso ocurrido en febrero de 1551 y recordado por Holinshed. Alicia revela en sueños a su marido Arden, rico burgués, su culpable pasión por Mosby, alma grosera que tiene un extraño ascendente sobre ella. Arden perdona, a condición de que Alicia prometa no ver nunca más a su amante; pero apenas lo ha prometido, trama con Mosby el asesinato de su marido. Mosby prepara una falsa reyerta en el camino, en la que se encuentra envuelto Arden, y se pone de su lado. Arden cree que ha sospechado injustamente e invita a Mosby a su casa. Pero allí, mientras ambos están jugando, dos asesinos asalariados matan a Arden. El delito se descubre y Alicia y Mosby son condenados a muerte. Todos los personajes están retratados sin retórica, con sólido realismo, en una atmósfera que no quiere embellecer la realidad; y que con sólo la exactitud de la representación hace odioso el delito. Los sufrimientos de los culpables están descritos con crudeza que tiene para el lector actual un valor de modernidad que aumenta el sentido dramático del desconocido autor, sobre el de otras tragedias de ilustres autores de la época.
Si por las rudezas de dicción parece imposible atribuir justamente el drama a Shakespeare, hay que reconocer que en Arden de Feversham hay un conocimiento del corazón humano que Shakespeare en sus principios hubiera podido envidiar. En Arden, que crea la tragedia familiar inglesa, el material del suceso está adaptado con una falta de flexibilidad que nunca tuvo Shakespeare, acostumbrado a modelar la historia tomada de prestado, con la libertad de su genial fantasía. Pero hay en el drama tales recursos de novedad y tal independencia respecto de los demás dramaturgos, que hace de él una obra de una pieza, de poderosa verdad, de tétrico humorismo y de trágica ironía.
A. Camerino