Nechliudov

[Dmitrij Ivanovič Nechljudov]. Protagonista del relato juvenil ha mañana de un propietario (v.) y de la no­vela Resurrección (v.) de León Tolstoi (Lev Nicolaevič Tolstoj, 1828-1910).

Ambos hé­roes tienen en común, además del nombre, cierto tono autobiográfico, que en el pri­mero va ligado al propio carácter autobio­gráfico de los acontecimientos, y en el se­gundo es como un reflejo de actitudes crí­ticas del autor frente a sí mismo. El prín­cipe Nechliudov de La mañana de un pro­pietario es una figura típica de la joven nobleza rusa en la época que precedió in­mediatamente a la abolición de la servi­dumbre de la gleba. Todavía ligados a los ideales utópicos de 1830 y de 1840, aquellos jóvenes eran más teóricos y soñadores que hombres de acción.

Nechliudov no se halla a la altura de la empresa que se ha propuesto, no porque sea moralmente in­ferior, sino, al contrario, porque en su ca­rácter enfermizo e indeciso faltan las cua­lidades indispensables a una actividad prác­tica: tenacidad, resistencia, energía y fuer­za de voluntad. Las reformas que quiere aplicar, más o menos oriundas del extran­jero, no corresponden a las necesidades in­mediatas y verdaderas de la vida de los campesinos, los cuales, embrutecidos por su condición de siervos de la gleba, no creen en sus dueños y con su escepticismo frustran toda tentativa de socorro, sin que el problema fundamental de la liberación sea atacado de lleno.

En la galería de los tipos que ese problema hizo surgir en Ru­sia, Nechliudov-Tolstoi es uno de los más interesantes, entre otras razones porque el propio escritor hubo de vivir personalmen­te todas las experiencias que acompañaron y siguieron a la abolición de la servidum­bre de la gleba.

E. Lo Gatto