El protagonista, que existió realmente (se trataba de un noble aventurero de Braunschweig), después de haber combatido contra los turcos, se retira a vivir en sus posesiones de Bodenwerder, entreteniendo a sus amigos con el relato de las fabulosas e increíbles aventuras de caza y de guerra de las cuales habría sido protagonista; entre muchas otras, cómo consiguió salir de un pantano tirándose de los pelos; cómo, durante una nevada, dejó a su caballo atado a un poste que, al derretirse rápidamente los metros y metros de nieve, resultó ser la aguja de un campanario, del cual el caballo quedó colgando; cómo se paseó por el espacio montado sobre balas de cañón, y cómo llegó dos veces a la luna.