Comedia en 3 actos
Entre los esposos Lavinia y Edward Chamberlayne la ruptura parece inevitable: ambos han estrechado una nueva relación, buscando en otra parte la comprensión que no parecen ya capaces de darse recíprocamente. En realidad ni Celia, la amante de Edward, ni Peter, el amante de Lavinia, se sienten satisfechos por estos lazos: Celia advierte la sequedad de Edward y Peter se da cuenta de que está enamorado de Celia y no de Lavinia.
Un misterioso huésped del cocktail party que tiene lugar en casa de Edward, un tal Riley, especie de médico de almas, consigue unir de nuevo a los Chamberlayne, que aprenderán a comprenderse mejor y a tolerarse. Los caminos de Peter y de Celia, en cambio, se dividen: Peter se marcha a California, donde se ocupará de cine, y Celia se va, como misionera, a una isla perdida donde acabará asesinada.