El protagonista (Simplicius Simplicissimus) es un ingenuo labrador que se ve mezclado en una serie de peripecias que tienen como telón de fondo la guerra de los Treinta Años.
Hijo de un guardabosque, huye, siendo niño, de su cabaña quemada por los soldados y es recogido en el bosque por un ermitaño que lo educa e instruye.
Cuando el ermitaño muere, la soldadesca, tomándole por un espía, lo captura y se lo lleva a Hanau; aquí es liberado por un pastor protestante y acto seguido se convierte en el bufón del gobernador.
Raptado por los croatas, se mezcla en innumerables y asombrosas aventuras, alternando vida militar y vida de bergante. Por último, a través del lago de Mummelsee (el lago sin fondo), desciende hasta el centro de la tierra y encuentra al rey de los silfos que le hace entrega de un tesoro.
Con él Simplicissimus adquiere un pequeño terreno, donde piensa vivir por fin en paz junto a sus reencontrados padres. Aquí la novela parecería haber llegado a su fin, pero el autor quiere añadir nuevos viajes y sueños alegóricos, luego de los cuales el protagonista naufraga en una isla desierta, se convierte al catolicismo y se prepara para una buena muerte.
Enci. Garzanti