[Rime estemporanee]. Colección de composiciones líricas de Teresa Bandettini, de Luca (1763-1837), editada en 1801 y reimpresa, aumentada con composiciones inéditas, en 1835. Esta célebre improvisadora, llamada en la Arcadia Amarilis Etrusca, coronada con laurel en Roma, Perusa, Mantua, elogiada en verso por Parini, Monti, Pindemonte y hasta por Alfieri, suscitó entusiasmos hoy inexplicables, ya que ninguna virtud poética apoya su virtuosismo.
Indiferente al contenido, canta los temas que se le ofrecen, mitológicos, bíblicos, griegos, romanos, cristianos, científicos, cortesanos y mundanos. Junto al «Incendio de Roma» está «Alfieri en el Elíseo»; junto a «La física de las plantas» está «La asunción de la Virgen»; junto a «El nacimiento de Palas» está el «Problema de si es mejor ver a la amada y no poderle hablar, o hablar con ella sin poderla ver». Emplea los metros más distintos y las formas más variadas con el mismo abundante prosaísmo: tercetos, estrofas arcádicas, octavas, sáficos, canciones. En el virtuosismo de la Bandettini se encuentran las más remotas reminiscencias literarias, ya que era ella una gran lectora y, cuando era bailarina, según dicen, leía a Dante entre bastidores.
En sus rimas se juntan las gracias melindrosas de un Bertola con la elocuencia de Frugoni, la lindeza de Metastasio con la teatralidad de Monti, el moralismo de Parini con la sombría poesía sepulcral prerromántica. Sigue a las rimas un ensayo de «Poesías pensadas», en las que dominan las fábulas y los elogios, dedicados con la misma indiferencia a Bonaparte y Nelson.
R. Ramat