El pastor Gabriel Oak sufre dos grandes desgracias: la pérdida de su rebaño, su única fuente de subsistencia, y el rechazo de una guapa forastera, Batsceba, de la que se había enamorado a primera vista. Ésta, mujer inquieta e independiente, ha heredado de su padre una hacienda y Gabriel se convierte en su trabajador y posteriormente en su administrador. A la mano de Batsceba no sólo aspira Oak, sino también el rico arrendatario Boldwood; pero ella, presa de una loca pasión, se casa con el desaprensivo sargento Troy.
Muy pronto, desenamorado de su mujer y profundamente amargado por la muerte de Fanny, la muchacha a la que amaba y a la que había dejado por Batsceba, se aleja de casa y se le da por muerto. Cuando está ya todo dispuesto para la boda entre Batsceba y Boldwood, Troy aparece de nuevo, pero es asesinado de un disparo de fusil por Boldwood, que se entrega a la policía. Batsceba se casará entonces con Oak, que la ha esperado con inmutable amor.