Forma parte de las Escenas de la vida de provincias, en los Estudios de costumbres de la Comedia humana.
Grandet, un comerciante de Saumur, ha reunido una fabulosa fortuna, pero dado que es un avaro obliga a vivir con estrecheces a su mujer, a la sirvienta Nanon y a su hija Eugénie. Sumisa y devota, Eugénie, que es la más rica heredera de la pequeña ciudad, es codiciada por las dos grandes familias del lugar, aunque ella se muestra indiferente ante cualquier pretendiente.
Cuando se produce, sin embargo, la llegada de su primo Charles, un joven dandy parisino arrastrado por la ruina del padre, descubre de pronto el amor. Mientras su padre maniobra para recuperar los créditos del hermano, la muchacha ofrece a su primo todos sus ahorros con el fin de permitirle partir y rehacer una fortuna en las Indias.
Él le promete que a su regreso se unirá a ella en matrimonio. Cinco años más tarde, muertos ambos progenitores, Eugénie hereda una sustanciosa fortuna; pero también Charles se ha enriquecido y se casa con una joven de noble cuna. Desilusionada, Éugénie se resigna a casarse con el anciano Cruchot de Bonfons, a condición de que el matrimonio no sea consumado. Al quedar muy pronto viuda, dedica su dinero a obras de beneficencia.