[Daisy Miller]. Breve novela del escritor norteamericano Henry James (1843-1916), publicada en 1878. Americano de nacimiento, James se hizo europeo por sus gustos y su cultura; el contraste psicológico entre el europeo y el americano, que constituye en gran parte el motivo de sus obras, está bien representado en Daisy Miller, una muchacha americana, bella y rica, que suple con encantadora desenvoltura la falta de una educación refinada. Independiente, llena de sinceridad y de coquetería, rodeada de una nube de adoradores, lleva consigo la naturaleza y las costumbres de un mundo nuevo, pero la sociedad de la vieja Europa da la voz de alarma y en torno a ella se hace el vacío. Daisy tiene un fiel adorador, Giovannelli, un cumplido muchachote, conocido como cazador de dotes. Le recibe privadamente en su hotel, se muestra en todas partes con él, incluso de noche, paseando solos por Roma. Todas las apariencias están contra ella, inclusive Winterbourne, que ha sido siempre uno de sus fieles paladines, no puede ya creer en su inocencia.
El juego exterior del argumento cede en este punto al examen psicológico, y el alma de Daisy, como la del propio autor, está retratada en una sucesión de toques delicados, exactos, que logran dar a la figura la línea definitiva, el significado inolvidable. Una noche, cuando Daisy va con su amigo a contemplar el Coliseo a la luz de la luna, contrae el paludismo y muere a los pocos días. Ante la tumba de ella, conoce Winterbourne, por boca de Giovannelli, la verdad: Daisy era pura e inocente; llevaba en sí, junto con su belleza, el deseo de conocer la vida, de sentirse libre y feliz. La figura de Daisy Miller es una de las mejores imágenes femeninas de las que James ha narrado, con penetración y en cierto sentido con doliente respeto, la vida interior. [Trad. de Eduardo Warshaver (Buenos Aires, 1947)].
L. S. Filippi