Nació el 10 de noviembre de 1697 en Londres, donde murió el 26 de octubre de 1764. Fue el más «británico» de los pintores ingleses,, y uno de los dibujantes satíricos más geniales. Poseedor de un formidable talento pictórico, todavía niño dejó la escuela y entró como aprendiz al servicio de un grabador de vajilla. No sabemos con precisión cuántos años permaneció junto a él; pero sí que en abril de 1720 H. tenía un taller de grabado propio. Según el escritor John Nichols, quien habla de él en sus Anécdotas, empezó a trabajar por su cuenta como grabador de armas y de planchas para libros. La primera de éstas fue «Masquerade and Operas» (1724), sátira de las locuras contemporáneas; en 1726 H. preparó doce grandes grabados para el Hudibras de Butler. Sin embargo, la obra que lo dio a conocer fue una serie de ilustraciones para el Quijote, tema adecuado, a su inspiración satírica.
Poco después se especializó en escenas de la vida contemporánea, y no abandonó ya este campo, fecundo en grandes posibilidades polémicas y morales. El 23 de marzo de 1729 se casó con Jane Thornhill, y en 1730 se hallaba en South Lambeth, donde colaboró con el entonces famoso Jonathan Tyers, para quien pintó un cuadro en el cual aparecían Enrique VIII y Ana Bolena. Los grabados más notables de este período son «Large Masquerade Ticket» (1727), sátira de las mascaradas, y «Burlington Gale» (1731), citado por Pope en la Epístola a Lord Burlington, en la que se defiende a lord Chandos, a quien el pintor atacara; el grabado, en efecto, fue considerado gravemente injurioso, y H. hubo de destruirlo. Atraído cada vez más por el hombre y sus costumbres, vio afinarse y concretarse su gusto por la narración, también gracias al contacto con el teatro, que le sugirió una composición de figuras inspirada en una escena de La ópera del mendigo (v.), de John Gay. Al éxito de esta obra siguió la primera de las tres series más célebres de H.: «The Harlot’s Progress», que describe la «¡carrera» de una mujer de costumbres frívolas. En 1733, mientras tanto, el artista se había establecido en Leicester Fields, donde permaneció hasta su muerte, excepto en el curso de algunas visitas ocasionales y brevísimas a Chiswick.
En diciembre de este mismo año inició la serie «A Rake’s Progress», que no alcanzó gran éxito; pero tiene, entre otras cualidades, el mérito de haber inspirado recientemente la obra homónima de Strawinsky. Más tarde H. llevó su crítica de los excesos del vicio a las costumbres de la alta burguesía, y concluyó la tríada con la serie que posiblemente cabe juzgar como su obra maestra: «Mariage á la mode», de abril de 1745. Al mismo año pertenece el famoso autorretrato que se halla actualmente en la National Gallery de Londres. Los éxitos obtenidos por nuestro autor con tales grabados no se repitieron en su labor pictórica; sólo «The Lady’s Last Stake», obra realizada para lord Charlemont, logró favorables juicios, y le valió un encargo de sir Richard Grosvenor «sobre los mismos temas». Diversas afecciones físicas, las desilusiones de los últimos años y una querella con los amigos íntimos Wilkes y Churchill fueron debilitando progresivamente la salud de H. El artista murió en su casa de Leicester Square; la ceremonia fúnebre tuvo lugar en el templo de Chiswick, donde en 1771 sus. amigos le erigieron una tumba con un epitafio de Garrick.
Como él mismo escribió en sus notas autobiográficas, halló en la pintura su escenario, y en los hombres y las mujeres unos actores que mediante ciertas actitudes y posturas representan una especie de pantomima: la dura y real de un momento concreto de la vida inglesa, en un testimonio que, en este aspecto, resiste pocas comparaciones con la producción artística de los últimos siglos. H. revelóse también teórico del arte en El análisis de la belleza (v.).
B. Sanesi