Nació en Yedo (hoy Tokio) en 1762 y murió en 1838. Escritor japonés, fue vulgarmente conocido con el nombre de Takai Tomohiro. El padre era un funcionario de la policía «yoriki» del barrio de Shiba. Su gran afición al estudio le indujo a investigar atentamente la historia de su país, sobre todo la de la época de Kamakura (1186-1333), de la cual proceden buena parte de los temas tratados luego en sus obras. La actividad literaria de nuestro autor empezó hacia 1804. Su estilo, sencillo y fluido, fue muy apreciado. Takai Ranzan profesó una gran admiración a su contemporáneo Kyo-Kutei Bakin; sabemos que llegó incluso a creer indigna la intervención del famoso pintor Katsushika Hokusai (1760- 1849) en la ilustración de las obras del célebre novelista, criterio indudablemente injusto y dictado por una exaltada idolatría respecto de un escritor que, juzgado hoy, no parece ocupar un puesto muy superior al de Hokusai en el arte de su país. Fallecido Bakin, Takai Ranzan continuó su novela Shim- pen Suikogaden (El nuevo Shui-hu-chuan, noventa vols.), de la cual el difunto había escrito solamente diez tomos; la obra en cuestión fue publicada entre 1805 y 1828. Otro texto notable del autor que nos ocupa es la novela Kōshiden (v.).
Y. Kawamura