Pierre de La Gorce

Nació en Vannes (Bre­taña) en 1846 y murió en 1934 en París. Doc­torado en Derecho en 1869, ingresó tres años después en la magistratura. Sustituto en Saint-Omer desde 1876, los decretos Ferry sobre las congregaciones religiosas (1880) provocaron su dimisión y le indujeron a consagrarse por completo a la historia. Ello podría hacer pensar que su fe, móvil de una decisión tan grave, debió de inclinarle a la apologética por lo menos, si no precisa­mente a una postura tendenciosa. Pero, por el contrario, sus obras resultaron absoluta­mente imparciales desde este punto de vista.

A lo sumo, la Histoire de la seconde Répu­blique française, de 1887, adolece de un franco partidismo monárquico, y en la His­toria del Segundo Imperio (1898-1906, en 7 vols., v.) y la Historia religiosa de la Revolución francesa (1909 – 23, en 5 vols., v.) falta una justa atención a los factores económicos. Otras obras importantes, si­quiera menos monumentales, de nuestro autor son La Restauration (1926) y Char­les X (1928). Todas ellas ofrecen como mé­ritos indiscutibles la exclusión del estorbo que para el gran público suponen los docu­mentos, y una exposición clara y sugestiva en la dilucidación de las ideas y en la descripción de ambientes y personajes. En 1907 La Gorce ingresó en la Academia de Ciencias Morales y Políticas, y siete años más tarde en la de Francia.

C. Falconi