Nació en Ruán el 20 ó 21 de enero de 1632 y murió en París en enero de 1698. Tras dos tragedias, Pyrame et Thisbé, de 1674, y Tamerlan ou La mort de Bajacet, de 1676, muy pronto olvidadas, la tercera le procuró una fama equívoca porque estaba escrita en oposición a Racine. A la Fedra (v.) de este último, quisieron sus enemigos, reunidos en torno a la duquesa de Bouillon, que Pradon contrapusiese su Fedra e Hipólito (v. Fedra), representada casi al mismo tiempo que la obra maestra de Racine.
Y los adversarios del gran poeta hicieron el vacío al teatro en que se representaba Fedra, que sólo más tarde alcanzó el justo reconocimiento de su valía. Episodio famosísimo, engrandecido por la leyenda, que para nosotros no tiene más importancia que la de una anécdota en la biografía de Racine. Las muy mediocres composiciones de Pradon demuestran también la secreta admiración que sentía hacia su rival: son la Troade (1679), Statira (1679), Régulus l’Africain (1688), no exenta de algún valor; más tarde, Germanicus (1694) y Scipion l’Africain (1697).
V. Lugli