Nació en Fontenay-le-Cháteau (Vosgos) en 1751, murió en París el 12 de noviembre de 1780. Después de haber estudiado en el Colegio de l’Arc, en Dole, marchó a Nancy, en 1769, y allí empezó a dar lecciones para vivir, abriendo un curso público de literatura que tuvo pocos alumnos. Mientras tanto, escribía una novela de ambiente persa (Les familles de Darius et d’Eridame) e intentaba la poesía con el Début poétique (1772).
Más interés suscitó con su acerba sátira Le Carnaval des Auteurs (1773). Al año siguiente marchó a París con una carta de presentación para D’Alembert, pero fue mal recibido; presentó también un trabajo a la Academia (Le Poète malheureux), pero no tuvo éxito. Entonces, exasperado por los fracasos y por la mala acogida que le habían dispensado los escritores de más nombradía (entre los cuales La Harpe), se volvió contra el mundo oficial de los enciclopedistas y de los literatos con dos sátiras: Le XVIIIe Siècle (1775) y Mon Apologie (1778). Escribió también odas, las más conocidas de las cuales son Le Jugement dernier y la famosa Adiós a la vida (v.), compuesta pocos días antes de morir. Su melancolía, su breve vida, su pesimismo polémico crearon la leyenda de haber sido G. un genio incomprendido, muerto en la extrema miseria en el hospital, leyenda a la que dio más tarde ropaje novelesco de Vigny en Stello (1832, v.).
En realidad, tras sus difíciles comienzos, G. había alcanzado la protección del arzobispo de París, y con ella varias pensiones y subvenciones, gracias a las cuales vivía cómodamente. En octubre de 1870 cayó del caballo y se hirió gravemente: trasladado al hospital, sufrió la trepanación del cráneo y murió en su casa pocos días después.
P. Raimondi