Karel Jaromir Erben

Nació el 7 de noviem­bre de 1811 en Miletin y murió en Praga el 21 del mismo mes de 1870. Estudió en Hradec Králové y en aquella capital, donde actuó a lo largo de toda su vida como archivero y director del departamento municipal de Asistencia.

Inclinado a la etnografía, publi­có al principio dos colecciones de fábulas eslavas (1864 y 1869), de las que reconsti­tuyó los temas populares con un lenguaje luminoso y cristiano y adaptando a la mito­logía de los eslavos la exégesis naturalista de Miiller.

Al mismo tiempo transcribió los cantos del pueblo; la tercera y definitiva edición de su colección de canciones y fila­terías checas (1862-64) comprendió más de dos mil textos. Los citados trabajos fueron para Erben la base de la obra a la que se halla particularmente vinculado su nombre: La guirnalda (v.).

Inspirándose para los argu­mentos en el folklore bohemio y eslavo, creó en ella algunas baladas magistrales que ejercieron vasta influencia en el desarrollo de la literatura checa. Junto con las pintu­ras de Mánes y la música de Smetana, esta colección se convirtió en un ejemplo clásico de «estilo checo» e inspiró a músicos como Dvořák, Fibich y Novák. Como resultado de las investigaciones llevadas a cabo por su­gerencia del historiador Palacký en diversos archivos, Erben publicó además una serie de documentos titulada Regesta diplomática nec non epistolaria Bohemiae et Moraviae (1855).

Tradujo del ruso la Crónica (v.) de Néstor y dirigió la edición crítica de varios textos de la antigua literatura checa.

A. M. Raggi